miércoles, 27 de agosto de 2008

POBREZA ESPIRITUAL

¿Qué significa ser pobre de espíritu?


Simple y sencillamente, significa vacío, extravío, pérdida, baja estima personal.
Estar en estas condiciones es caer en cualquier forma de vicio, las emociones me traicionan, me condeno a la persecución de todo aquél que insinúe que tengo errores, me convierto en un vagabunda emocional, sin nada ni nadie que pueda contener mis ganas auto destructivas, mis resentimientos no me dejan dormir, no puedo estar conmigo misma, ni con los demás, mi corazón vive eternamente en la oscuridad, mis sentimientos son casi siempre negativos para mi y para los demás y de esa forma me relaciono conmigo y con los demás.
La pobreza espiritual me convierte en esclava de mis bajas pasiones y sentimientos, nadie es responsable del inframundo en el que vivi, siento, pienso. Mis deficiencias mentales se acrecientan, mis palabras, mis acciones
no tienen un soporte genuino y eso al descubrirlo, me duele y es cuando no lo soporto: agredo, critico, juzgo, mal-vibro a los demás, ocupo mi tiempo en tratar de apagar la luz propia que brilla en otros, pues mi propia luz no la dejo salir con mis propias dificultades para aceptarme y aceptar a los demás.
Si mantengo negro el corazón, mis actos serán iguales, mi miseria aumenta y no tengo control sobre mi odio y malestar en la vida.
¿Qué puedo hacer? Simplemente: aceptar que soy de la forma que soy y que no soy perfecta, aceptar si mi color de piel no me gusta, que es la piel que cubre mi cuerpo y que es maravillosa, si soy bajita, aceptar que es suficiente y estoy viva, si soy pobre, esforzarme para superar mi condición humilde, si tengo envidia de los talentos que desarrollan otros, trabajar sobre los talentos que yo tengo y brillar, si me siento fea, aceptar que ese es un concepto de inferioridad y que cada persona tiene una belleza diferente, si me siento sola, comenzar a ver en los otros sus virtudes y alentarlos en sus dificultades, si tengo limitaciones para expresarme, comenzar a leer para adquirir las destrezas del lenguaje y la expresión, si me creo superior, aprender que no soy ni peor ni mejor que otro sino yo misma, si me siento perfecta, aceptar que no lo soy, si creo que puedo dirigir la vida de los demás, aprenderé a soltar el control y dejaré de manipular, poco a poco, mis logros se verán compensados, con: más amigos, más tranquilidad interior, más posibilidades para cambiar, menos disgusto conmigo y con otros, menos resentimientos, más energía positiva y sentiré la fortaleza de mi propio espíritu y conquistaré mis sueños, para ello, dedicaré mi tiempo, mis palabras y mi esfuerzo a construir desde mi interior, la vida que quiero para mi misma y de esa forma podré dar a los demás...una sabiduría nueva, refrescante saldrá de dentro de mí, bañando mis sentimientos negativos con luz y confianza, con amor y ternura...entonces !!!la pobreza espiritual habrá desaparecido!!!!